por Nora Aslan
“Ojalá vivas tiempos interesantes” dice una antigua maldición china que la da nombre a esta serie. El mundo es una trama compleja desplegada sin principio ni fin. Se atisban paisajes apocalípticos, imágenes de guerras que son muchas y una sola.
Flotan como burbujas inestables ciertas escenas plagadas de fragmentos de apariencia inconexa que reconocemos cuando son examinados con atención. Por momentos se aquietan en horizontes precarios pero no tardan en mutar en otras configuraciones.
En estos escenarios es donde estamos inmersos